El mercado laboral puede ser bastante complejo para las empresas y los empleados que se unen a él. Por esta razón, le damos mucha importancia a los procesos de inducción, aunque, en los últimos años ha cobrado fuerza la tendencia del onboarding.
Esto consiste en un proceso a largo plazo donde el nuevo empleado se adapta a la empresa de manera progresiva. Permite que nos familiaricemos con el entorno y asumamos responsabilidades de manera gradual. Se considera ua forma de adaptación más natural que la inducción, que es mucho más condesada.
Haciendo un buen onboarding
Hay muchas formas para llevar a cabo este proceso, pero existen algunas actividades específicas que se pueden realizar para conseguir que la adaptación sea más cómoda para todos.
Lo primero que podemos hacer es indicarle que siempre habrá alguien disponible para resolver sus dudas, pero alentándolo a resolver las cosas por sí mismo. Es muy probable que, incluso son instrucciones específicas, el nuevo empleado tenga problemas para entender qué debe hacer, esto le dará la seguridad de que puede pedir ayuda, pero también que se espera iniciativa de su parte.
Además, podemos introducirlo poco a poco en las actividades realizadas por la empresa. Especialmente para la gente introvertida, estar en un ambiente nuevo rodeado de desconocidos puede ser algo intimidante, por lo que es mejor incluirlo de manera paulatina y siempre dando a entender que no habrá repercusiones si se niega.
También deberíamos permitirle observar la forma en que trabajan compañeros con puestos similares, de una manera que no interrumpa las labores de los demás. De esta forma, lo ayudaremos a tener una idea de cómo realizar su trabajo, generaremos una expectativa, entregaremos una base sólida y podemos darle ideas acerca de cómo organizarse.
Por último queremos hacerle parte del sistema e instarle a mejorarlo. No solo basta con mostrarle el funcionamiento de la empresa, es bueno incentivar al empleado a preguntar por qué las cosas se hacen de esta manera y pedir su opinión. Es muy posible que tenga experiencias interesantes de puestos anteriores que quiera compartir con nosotros, además, esto le hará sentir como un miembro importante del equipo.
Todas estas pautas permitirán a los nuevos trabajadores sentirse mucho más cómodos con la empresa. Por supuesto, esto se debe hacer junto a un buen proceso de introducción, para que tenga claras cuáles son sus derechos y responsabilidades dentro de la empresa antes de empezar con su trabajo. Además, realizar estas actividades generará un ambiente laboral mucho más agradable.
Por supuesto, estos procesos pueden ser complicados, pero hoy en día existe una gran variedad de empresas, cursos y capacitaciones a los que podemos recurrir para mejorar la experiencia de los nuevos trabajadores, entregando herramientas que nos permitan realizar buenas inducciones como crear planes para el onboarding a largo plazo.
¿Queremos saber cómo haces tu el onboarding en tu empresa? ¡Compartamos buenas prácticas!
